Fabada asturiana, o simplemente fabada, es el plato tradicional de la cocina asturiana elaborado con faba asturiana, embutidos como chorizo y la morcilla asturiana, y con cerdo.
Un cachopo es un plato característico de la cocina asturiana. Consiste en dos filetes de ternera grandes y entre ellos jamón serrano y queso. El conjunto se come frito y caliente tras ser empanado en huevo, harina y pan rallado y se suele servir con guarnición de patatas, pimientos o champiñones.
El pote asturiano, también llamado potaxe de berces o simplemente potaxe, es el cocido más tradicional de la cocina asturiana. Es un plato de gran sabor que suele prepararse en un pote u olla, de ahí su nombre, en época de matanza, y durante el otoño e invierno principalmente.
Pollo de raza autóctona asturiana criado sin pienso, es decir, comiendo lombrices, maíz, semillas, cereales, insectos, etc., guisado con patatas.
El chorizo a la sidra es una preparación de la cocina asturiana en la que se cuecen chorizos asturianos tras haber sido ligeramente asados. La cocción se realiza en sidra.
Uno de esos platos con los que querrás repetir y repetir. La merluza a la sidra es un plato típico de la cocina asturiana. Una receta saludable y llena de propiedades y vitaminas perfecta para comer al mediodía. Para aprovechar este plato al cien por cien, lo mejor es comprar una barra de pan y mojar en la salsa, que está de vicio.
El arroz con leche es un postre típico de la gastronomía de múltiples países hecho cociendo lentamente arroz con leche y azúcar. Se sirve frío o caliente. Se le suele espolvorear canela, vainilla o cáscara de limón para aromatizarlo.
La casadiella es un dulce típico asturiano. Se trata de una especie de empanadilla frita elaborada con una masa de harina de trigo que se rellena con una mezcla de nueces, azúcar y anís. También se pueden elaborar con masa de hojaldre, haciéndose en el horno. Al servir se espolvorea su superficie de azúcar.